Una droga es toda materia prima de origen biológico que directa o indirectamente sirve para la elaboración de medicamentos, y se llama principio activo a la sustancia responsable de la actividad farmacológica de la droga.
La droga puede ser todo vegetal o animal entero, órgano o parte del mismo, o producto obtenido de ellos por diversos métodos que poseen una composición química o sustancias químicas que proporcionan una acción farmacológica útil en terapéutica.
Según la Organización Mundial de la Salud una droga es toda sustancia que, introducida en el organismo por cualquier vía de administración, puede alterar de algún modo el sistema nervioso central del individuo que las consume.
Este término suele usarse indistintamente para designar a ésta y a los términos correspondientes en farmacia a principio activo, fármaco y medicamento, ya sea por extensión del concepto o debido a la traducción literal del término inglés drug, el cual no hace distinciones entre los tres conceptos.
Actualmente, el uso de la palabra “droga” está mal entendido. Pero a pesar de ello las podemos clasificar de la siguiente manera:
Existen por su venta, que son “legales” (medicamentos, tabaco y alcohol). Sin embargo el mal uso de las medicinas (automedicación o sobredosis), también es muy peligroso pues lleva a terribles consecuencias para la salud y la vida de quien los usa.
También existen drogas “ilegales” (marihuana, cocaína, heroína, éxtasis, sintéticas etc.…) estrictamente prohibidas por los daños físicos y consecuencias que ocurran. Dependiendo de su origen es como se les va a clasificar en naturales (marihuana, peyote, hongos, opio etc.…) y en sintéticos (éxtasis, metanfetaminas, etc.…).
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